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¡Bienvenidos aventureros de España! Te encuentras en el comienzo de un viaje inolvidable. ¿El punto de partida? El pintoresco Mardin, accesible a través del aeropuerto de Mardin, en mitad de la antigua Mesopotamia. Toma tu tiempo para descubrir la rica historia y la belleza única de esta ciudad.
Tu viaje empieza de verdad en cuanto aterrizas en el aeropuerto de Mardin. Aquí, hay numerosas estaciones de alquiler de coches que te ofrecen la independencia y la libertad para explorar a tu propio ritmo.
Con un coche de alquiler, no solo tienes la flexibilidad de viajar a tu ritmo, sino que también tienes la oportunidad de descubrir lugares menos conocidos que pueden no estar accesesibles en transporte público. Disfruta de la comodidad y el lujo de explorar a tu manera.
Conducir en Turquía puede ser diferente a lo que estás acostumbrado. Recuerda usar siempre el cinturón de seguridad y seguir las señales de tráfico. En áreas urbanas, el límite de velocidad es de 50 km/h, mientras que en carreteras fuera de la ciudad puedes conducir hasta 90 km/h.
La moneda local es la lira turca. Encontrarás cajeros automáticos en todo Mardin y la mayoría de las tarjetas de crédito extranjeras son aceptadas. Sin embargo, es recomendable llevar algo de efectivo, especialmente para mercados y tiendas pequeñas.
Mardin tiene un clima semiárido, con veranos calurosos y secos e inviernos fríos y húmedos. Asegúrate de revisar el pronóstico del tiempo para vestirte adecuadamente.
El aeropuerto de Mardin se encuentra a unos 20 km al sur del centro de la ciudad. Hay taxis disponibles las 24 horas del día, aunque te recomendaríamos alquilar un coche para aprovechar al máximo tu visita.
No puedes irte de Mardin sin visitar el magnífico monasterio de Deyrulzafaran y la Gran Mezquita con su majestuosa vista panorámica. Explora las estrechas calles y bazares para encontrar joyas ocultas y emocionantes.
Prepárate para sumergirte en la rica historia y cultura de Mardin. ¡Buen viaje!